Esta preciosa cala, de 185 metros de largo y cercana a la playa de Monsul, toma su nombre de la forma de la playa, una media luna de arena con formaciones rocosas a ambos lados que proporcionan sombra y cobijo. Con aguas transparentes, pequeñas cuevas y arena fina, este bello paraje suele estar bastante concurrido los fines de semana y durante el verano, aunque casi nunca llega a estar llena.