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Calle Carlota Quintanilla y Hacienda la Buzona
Como es sabido, Carmona es una de las ciudades de mayor abolengo histórico de la provincia, por lo que cuenta con una abundante y extraordinaria arquitectura religiosa, civil y militar que hacen de Carmona una ciudad espectacularmente monumental. Entre las calles más destacadas por su belleza se encuentran la calle Carlota Quintanilla, rodeada de monumentos en pleno casco histórico de la ciudad.
La Buzona es una de las más notables y mejor conservadas haciendas de Carmona. Localizada en las terrazas de los Alcores, la zona olivarera por excelencia del municipio, su acceso se realiza desde la carretera Brenes-Carmona, que discurre flanqueada de haciendas como ésta. Junto a la carretera se disponen los postes que señalan el corto camino que se dirige directamente al caserío.
Aquí se rodó
La calle Carlota Quintanilla reproduce en ‘La Peste’ las gradas a los pies de la Catedral de Sevilla, donde se recrea el mercado de esclavos, donde los mercaderes muestran a los futuros siervos, que desprenden exotismo y aparecen adornados con colmillos y huesos. Muy cerca, la Cilla del Cabildo de Carmona, un antiguo granero al servicio de la Iglesia, sirvió para recrear una taberna y el hospicio. Finalmente, todo lo relacionado con el médico Nicolás Monardes, el célebre jardín botánico, con plantas del Nuevo Mundo, y la sala donde asiste a los enfermos y practica las autopsias, prohibidas en la época, se rodó en el Palacio del Conde de Rodezno.
La Hacienda La Buzona de Carmona sirve para recrear el mercado de entrada a Sevilla en el que se adentra Mateo cuando llega por primera vez a Sevilla.