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La cadena Kempinski Hotels, una de las más antiguas de Europa, está entre las más reconocidas del lujo en el mundo. Por ello, al cumplir su centenario quiso unir su marca a la de la Costa del Sol y abrió en Estepona en 1999 su primer -y único- establecimiento en nuestro país, el Kempinski Hotel Bahía España. Situado en primera línea de playa, la firma quería un hotel icónico y no buscó muy lejos ya que recurrió al creador del estilo vacacional de Marbella, el arquitecto sudamericano Melvin Villarroel, para este gran edificio que inauguró la segunda generación de la obra urbanística de este autor, caracterizada por la integración con la naturaleza y la arquitectura del vacío -la ocupación de sólo el 30% del terreno-. El Kempinski español dispone de un espacio verde de 40.000 m2 de jardines autóctonos y subtropicales.
Aquí se rodó
Eso de que Torrente es un poli cutre no está tan claro desde que el policía cambió la castiza Madrid por la lujosa Marbella en la secuela de su famosa saga, ‘Torrente 2: Misión en Marbella’. Y por hoteles cinco estrellas como el Kempinski, donde se rodó la recordada escena en la que el casposo protagonista se alivia en la piscina, pero es descubierto por José Mota porque el agua tiene un químico especial que cambia de color con los escapes escatológicos de los bañistas. Pero tranquilos la piscina ya la han desinfectado. Por cierto, el hotel de Estepona no fue el único que aparece en la película ya que también se rodaron tiroteos en las habitaciones del Don Miguel de Marbella que acaba con un ‘balconing’ a otra piscina.