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Una parte de ‘Madre amadisima’ se rodó en Sevilla, en el Antiguo matadero, situado entre la Ronda del Tamarguillo y la Avenida Ramón y Cajal. Pilar Távora, la directora, contó en una entrevista que estaba “contentísima de grabar en mi barrio. Lo mejor es que todos los días sólo tengo que cruzar la calle para ir a comer a casa de mi madre”. Hubo, eso sí, que esperar a que llegaran las vacaciones de verano para poder rodar, ya que en la actualidad se encuentran allí el Colegio Ortiz de Zúñiga, el Conservatorio Profesional de música Francisco Guerrero y el Centro de Adultos San Juan de la Cruz.
La casa en la que se rodó ‘El palomo cojo’ perteneció a los abuelos de Eduardo Mendicutti, el autor de la novela en la que está basada la película. Convertida actualmente en un hotel, se tuvo que amueblar entera para la grabación, ya que cada habitación respondía al carácter del protagonista que en ella habitada, lo que hizo la tarea aún más difícil.
En ‘La ley del deseo’ se hacen varios guiños a la obra de pintor Edward Hopper (1882-1967). Uno de ellos en una de sus escenas más míticas y a la vez, más dramáticas: cuando Juan muere a manos de Antonio. El faro que aparece de fondo, y que ellos han ido a ver en plena noche, es el Faro de Trafalgar, en Barbate.
Desde que Pedro Almodóvar rodara en Conil de la Frontera (Cádiz) parte de su película “La ley del deseo” (1987), varias han sido las películas rodadas en Andalucía que han abordado la temática homosexual. Bien por un deseo de rodar en casa o bien por exigencias del guion, Andalucía se ha convertido, en estas películas, en uno más de los protagonistas de unas historias cuyo objetivo final es hacer una oda a la tolerancia y al respeto por los otros, sin importar su orientación sexual, procedencia, creencias o su pasado.
El cine ha sido uno más de los recursos que ha tenido el colectivo para contar sus historias. Una reivindicación por la igualdad que han hecho suya directores nacionales e internacionales sin importar su edad, género u orientación sexual, que han elegido Andalucía como lugar de encuentro.
«Andalucía, siempre que pueda, será escenario de mis películas y, cuando no lo sea, posiblemente será para contar algo que tenga que ver con ella. Y me dan igual las críticas que pueda traerme esto. Eso no se puede entender más que desde el amor profundo que siento hacia esta tierra.»
«Andalucía, siempre que pueda, será escenario de mis películas y, cuando no lo sea, posiblemente será para contar algo que tenga que ver con ella. Y me dan igual las críticas que pueda traerme esto. Eso no se puede entender más que desde el amor profundo que siento hacia esta tierra.»
